Un año más, llega la fecha de hablar con el alumnado de diversidad afectivo-sexual e identidad sexual. Es un tema que fascina a nuestro alumnado, así que ¿por qué no hablarles de ello?
Cuando se habla de diversidad afectivo-sexual y de identidad en clase, es muy importante que el alumnado diferencie entre lo que es el sexo que nos asignan al nacer (al que no me gusta llamar sexo biológico, sino que me gusta verlo más como un diagnóstico médico basado en una exploración visual de «lo que hay»), el género (que nos impone la sociedad según el diagnóstico anterior y que se espera que se cumpla), la orientación (de la que ya el alumnado de Secundaria ha oído hablar) y la identidad (o sexo de la persona, independiente del diagnóstico hecho).
Por ello, hablo de que hay hombres con pene, hombres con vulva, mujeres con pene y mujeres con vulva, además de las personas intersexuales (que no personas hermafroditas).
En cualquier caso, el sexo de la persona viene dado entonces no por el diagnóstico, sino por la identidad de cada uno, de la idea de pertenencia a uno u otro grupo de personas.
Así evitamos también la idea de «el cambio de sexo», o «que quieren ser del sexo contrario», como si de un capricho se tratara. NO. Son hombres y mujeres que quieren que se les trate como tal. Seguro que a ninguno de nosotros, ni a ninguna de nosotras nos gustaría que nos trataran como quien no somos.
Al respecto, les recomiendo el material didáctico de Chrysallis (Asociación de Familias de menores transexuales) disponible en varios idiomas y que incluimos en el presente artículo
Material didáctico: «Chicas y chicos. Identidad y cuerpo» (t) by Chrysallis Euskal Herria on Scribd